Ya hace tiempo les platiqué de la emoción que sentí cuando pude charlar por unos minutos con Lars, Kirk y Rob, de Metallica. Ahora imagen lo que sentí cuando confirmé su visita a México el próximo junio. Indescriptible.
Ahora sólo deseo que todos aquellos que los han criticado desde Load no vayan al concierto, por una simple razón.
Ahora ir a ver a tu banda favorita, cualquiera que sea, se ha convertido en un evento de sociales. La gente va para ver y que la vean, para presumir sus mejores garritas y para platicar que estuvo ahí. No me voy a poner en plan fan-from-hell de Radiohead del tipo: 'Ash, súper naco que hayan tocado Creep, es para loosers'. Lo malo es que ya veo a todos esos que han criticado a Metallica, con cerveza en mano, saltando y gritando. Entonces, ¿les gusta o no les gusta? Make up your mind. Se vale que no les guste y los critiquen, pero háganlo por convicción no porque escucharon a Rulo o a Sopitas decir que son malísimos.
Yo espero no tener que preocuparme por mis boletos, estoy seguro que mi anónima favorita compensará los miles de regalos de todos mis viajes con un par de tickets. (Si quieres en los comments nos ponemos de acuerdo con el método de entrega o me los dejas donde yo he dejado los tuyos, ¿va?)
En otras cosas, que alguien me explique. Después de un mes de inactividad,lo normal, según yo, sería engordar terriblemente. Sin embargo adelgacé. ¿A qué se debe?
Luego, he pasado dos jueves arreglando el mundo y descubriendo una cantidad de cosas que esconden las mujeres que hasta yo me espanto. Tengo 3 confidentes muy efectivas que seguro pagarían una lana con tal de que sus secretos no lleguen a oídos de sus maridos. ¿Cómo nos arreglamos chicas? Aunque quizá ni siquiera debo amenazar con ello, creo que producto del whisky he confesado también varios trucos que no necesariamente deberían saber, entonces mejor lo tomamos como que estamos a mano.
Conclusión: Me perdí Radiohead por el yeso pero ahora viene Metallica.
¿Ya leyeron La Carretera, de Cormac McCarthy? Corran, cómprenlo y regocíjense con los alcances de la miseria humana.
Lucas es feliz.
Ahora sólo deseo que todos aquellos que los han criticado desde Load no vayan al concierto, por una simple razón.
Ahora ir a ver a tu banda favorita, cualquiera que sea, se ha convertido en un evento de sociales. La gente va para ver y que la vean, para presumir sus mejores garritas y para platicar que estuvo ahí. No me voy a poner en plan fan-from-hell de Radiohead del tipo: 'Ash, súper naco que hayan tocado Creep, es para loosers'. Lo malo es que ya veo a todos esos que han criticado a Metallica, con cerveza en mano, saltando y gritando. Entonces, ¿les gusta o no les gusta? Make up your mind. Se vale que no les guste y los critiquen, pero háganlo por convicción no porque escucharon a Rulo o a Sopitas decir que son malísimos.
Yo espero no tener que preocuparme por mis boletos, estoy seguro que mi anónima favorita compensará los miles de regalos de todos mis viajes con un par de tickets. (Si quieres en los comments nos ponemos de acuerdo con el método de entrega o me los dejas donde yo he dejado los tuyos, ¿va?)
En otras cosas, que alguien me explique. Después de un mes de inactividad,lo normal, según yo, sería engordar terriblemente. Sin embargo adelgacé. ¿A qué se debe?
Luego, he pasado dos jueves arreglando el mundo y descubriendo una cantidad de cosas que esconden las mujeres que hasta yo me espanto. Tengo 3 confidentes muy efectivas que seguro pagarían una lana con tal de que sus secretos no lleguen a oídos de sus maridos. ¿Cómo nos arreglamos chicas? Aunque quizá ni siquiera debo amenazar con ello, creo que producto del whisky he confesado también varios trucos que no necesariamente deberían saber, entonces mejor lo tomamos como que estamos a mano.
Conclusión: Me perdí Radiohead por el yeso pero ahora viene Metallica.
¿Ya leyeron La Carretera, de Cormac McCarthy? Corran, cómprenlo y regocíjense con los alcances de la miseria humana.
Lucas es feliz.